Pelearé hasta el último segundo y mi epitafio será: no estoy de acuerdo.
Joaquín Sabina
Ahora tengo la edad a la que tu ya no llegaste; han pasado ya tantos años y aun sigo recordándote igual.
Tengo tan frescos los recuerdos de cuando empezó tu final; esa terrible e imborrable mañana de Junio; una llamada donde me contaban lo sucedido, minutos después tu llegabas, venias con una playera roja y detrás de tus lentes se asomaban tus lágrimas, solo pude abrazarte y decirte que todo saldría bien y que no había sido tu culpa. Todos dejamos de sonreír; no importaba los problemas que desgraciadamente ese año estábamos pasando; lo único que nos importaba eras tu; que supieras que aunque no lo decíamos, te amábamos.
Las reuniones de los domingos se convirtieron en oraciones; y estábamos tan débiles; y sin embargo tu seguías sonriendo y dándonos fortaleza.
Recuerdo como si hubiera sido ayer; esas palabras que jamas creí que serian las ultimas que me dirías solo a mi; me sentía igual como me siento ahora; triste, decepcionada; eran las cero horas de ese primero de enero y tuve que salir a tomar aire porque no podía fingir que estaba feliz; me recargue en la puerta y tu venias llegando, me abrazaste, me consolaste a pesar de lo que tu traías dentro; tomaste mi mano y me dijiste: "Pawa todo va a salir bien; todo va a estar mejor este año, todo va a salir bien..."
Tu sonrisa, tan hermosa como siempre, me conforto; solo pude decirte que las cosas saldrían bien para los dos y que no se te olvidara lo mucho que te quería.
Son las 19 horas de ese maldito 20 de febrero, estoy a 3 horas de distancia cuando me avisan que algo sucedio; hora y media después paro por un café y exigí me digan la verdad; me lo confirman, ya no estas en este mundo; no puedo respirar, me siento en el suelo hasta recuperar fuerzas y llegar donde desgraciadamente ya no estas.
Hoy, a pesar de todo, sigue tu presencia, y estos días me repito una y otra vez esas palabras que me decías esa madrugada...todo estará bien...
Mi mundo cambio desde que no lo habitas; aun dueles, se te extraña y ama igual; pero agradezco la fortuna de conocerte.
Quería escribir hoy sobre Marco; se lo debía y necesitaba tenerlo aquí en mi blog, porque siempre sera parte de mi vida.
Para que no se me olvide sonreír...
Para que no se me olvide sonreír...
Hola Paulina, hola amiga... nadie se va del todo, siempre algo queda, es la magia de la vida.
ResponderEliminarAbrazos fuertes para ti
Gracias por tus abrazos Enrique!!
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